Desnudando Sensaciones

Atrevernos a tansitar lugares íntimos donde se albergan las emociones, disfrutando del viaje que estamos emprendiendo, explorando nuestras propias elecciones, nuestros deseos, dialogando con nuestra voz interior, y buscando en nuestros sueños más ocultos las ansias de nuestro ser.

Me gusta un hombre que sea fuerte ante los obstaculos, que no lo aniquilen las derrotas y  se respete a si mismo, que sepa reconocer mis valores y mi sensibilidad, que tenga los brazos abiertos para poder refugiarme en ellos,  que no tenga miedo de amar, y me haga  soñar. Que sea seductor,  provocativo,  que tenga una dosis de magnetismo y eleve mis sentidos.

Tu desnudez intuye mi presencia, la deseo, mis manos la cobijan, mi cuerpo será el refugio que busca y mi boca la calmará sabiamente...

Entro en tu mente y leo lo que piensas... un recitar de ansias y delirios, y me enriedo en tus palabras.

Descanso en tus manos, marcas el compás con la música de tus dedos creando la armonía de mis formas .

Ella perfumó su piel y vistió su cuerpo con un vestido rojo sugestivo y medias negras caladas que acariciaban sus piernas, fué camino hacia ese viejo bar donde habitan personajes de la noche en búsqueda de tragos y placer. Indómita,  iba con su  envolvente vestido  que acentuaba sus formas y sus piernas terminaban de embelezar su  figura que llamaba a la locura.  Provocativa , insinuante, se sentó  explorando el inminente sabor de la noche ... el delirio se adueñó de sus pasos y  también de ella...

Voy a   devorar tus ansias, saboreando cada instante, y muy despacio voy a besar tu aliento... disfrutando apacible el recorrer tu cuerpo.

Navegas en mis pensamientos, susurras en mis oídos, besas mis secretos, acaricias mis suspiros y te presentas en mis sueños, habitando en mi corazón y estremeciendo mi alma.

. No quiero que me descubras completamente quiero que sea con mesura que sea lento, hasta el momento en que la noche mire el día en un nuevo amanecer.

Hay personas que hicieron sonreir mi corazón, que hicieron mi vida diferente, hay personas que entraron en mis sueños,                         y algunas personas                        a quienes  no les pude decir cuanto las quiero.

Se llenó de magia esa noche y dentro de su corazón podía escuchar el murmullo del mar, hablarle a la luna y transformar el silencio en melodía, podía capturar la belleza quitándole el antifaz al dolor, y fue recreando una dulce melancolía con el recuerdo de momentos de vida que ensombrecían los sueños...

Escribo y expreso lo que siento, desbordadas sensaciones fluyen reflejando mis pensamientos.

Vas impregnando mi ser como gotas de rocío que resbalan hasta amoldarse en deliciosa coincidencia. Con la osadía al transitar mis formas provocas un dulce tormento; y un cóctel de deseo y calma se queda en mi mente aquietando las ansias en un exquisito encanto.

Viendo la lluvia que empapa mis sentidos, que recorre suave y fria mi alma, dibujé tu nombre en la ventana, como una niña jujando enamorada, sali de pronto a buscar esos recuerdos que vi plasmados en la ventana, y cada gota que se escurrió en mi, me hizo sentir esas ganas de ti...

Deseo un deseo inconfesable, quiero escribirlo pero no puedo ni palabra para expresarlo, un deseo que es un latido fuerte sólo escucho latidos en mi corazón, en tanto me siento estremecer   y ese pálpito feróz...

Las ilusiones se apagan, se aloja la nostalgia, los sueños se desmoronan, la desesperanza derrumba y el corazón llora. Si estás solo llena ese vacio.

Cuando salieron aquellas palabras de los labios, el desconcierto los paralizó,   las manos se soltaron y los caminos se separaron, la distancia era cada vez mayor, y los dos se negaban a admitir un adiós ... Sus ojos veian sus cuerpos pero no veían sus almas, escuchaban sus palabras pero no su voz, el corazón se agitaba absurdamente,  pero llegó  la decepción... La esperanza se hizo cansancio y el amor renunciamiento aún, sin admitir un adiós…

Ese chico no entendía ese atardecer, en silencio esa bella mujer no parecía ser inalcanzable,  el no se atrevió a comtemplarla. Ella desde su madurez fue desnudando su cuerpo y así mato uno a uno sus miedos, lo invadió... le mostró el instinto sediento de mujer plena. Cada beso, cada caricia lo desbordaron, aprendió el lenguaje de los cuerpos y creció el hombre al estallar furioso en esa exquisita piel devorada. Ella entendió desde un principio ese atardecer; el nunca lo olvidó.

                                                                                           Enfundada en el deseo de mi piel, danzan sin límites impetuosas tus manos, besos impacientes se quedan en mis labios, sigiloso navegas,  descubres mis misterios y conmocionas mis ansias.

Enciendes mis sentidos, estremeces mi vivir, sacudes mi alma...